Caracas, 9 de diciembre de 2025 — EE. UU. intensifica presión militar sobre Venezuela con drones y aviones de combate
Caracas — Este martes, el cielo venezolano volvió a convertirse en escenario de una nueva escalada en la tensión entre Washington y Caracas. Plataformas de rastreo aéreo como Flightradar24 registraron el ingreso al espacio aéreo frente a la costa venezolana de un dron estadounidense de vigilancia e inteligencia, junto con el paso de dos aviones de combate. El episodio —denunciado de inmediato por el Gobierno venezolano— es ya considerado por Caracas como una “provocación imperialista” que viola su soberanía.
🔹 Qué se reportó oficialmente hoy
- Según reportes de prensa, el dron no tripulado MQ-4C Triton —fabricado por el grupo estadounidense Northrop Grumman— fue detectado cruzando el espacio aéreo frente a la costa venezolana. Se le atribuye una misión de vigilancia, inteligencia y reconocimiento (ISR), con capacidad para monitorear movimientos navales y terrestres desde gran altitud.
- A la par, dos aviones de combate F‑18 Super Hornet sobrevolaron aguas interiores venezolanas, en una zona cercana a la base naval “Rafael Urdaneta” en Maracaibo, una región de alta importancia estratégica para la defensa occidental del país.
- Ambos hechos se suman a una serie de incursiones denunciadas en los últimos meses: en octubre pasado las autoridades venezolanas informaron sobre la presencia de cinco cazas furtivos F‑35 cerca de sus costas, a unos 75 km del litoral, lo que fue calificado como “amenaza a la seguridad nacional” y una violación de la normativa internacional de aviación.
✍️ Reacción del gobierno venezolano y contexto diplomático
El régimen encabezado por Nicolás Maduro —y su alto mando militar— denunciaron la maniobra como una “provocación inaceptable” que pone en riesgo la soberanía de Venezuela. Autoridades como el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, y el canciller Yván Gil afirmaron que tales incursiones constituyen “hostigamiento militar” y anticiparon que cualquier nueva agresión enfrentará una respuesta firme.
En el plano internacional, la declaración unilateral del presidente de Estados Unidos, Donald J. Trump, declarando el espacio aéreo venezolano como “cerrado en su totalidad” generó condenas de países aliados de Caracas, que lo calificaron como una amenaza directa contra la nación latinoamericana.
⚠️ Qué implica para Venezuela y la región
Este tipo de sobrevueltos —tanto de drones como aviones de combate— en zonas de jurisdicción cercana a las costas venezolanas representa:
- Una señal clara de presión militar directa contra el país, incrementando el riesgo de un incidente con consecuencias graves.
- Un nuevo factor de inestabilidad para la aviación civil: ya varias aerolíneas internacionales han suspendido vuelos hacia Venezuela, alterando rutas y afectando a ciudadanos venezolanos y migrantes.
- Un contexto de tensión diplomática e internacional —no sólo entre Washington y Caracas, sino también involucrando actores regionales— que podría escalar hacia más sanciones, bloqueos o incluso actos de carácter militar más agresivos.
📰 Perspectiva del periodismo de exterior: lo que debemos vigilar
Como corresponsal desde el exterior para un medio venezolano, estos eventos deben ser narrados con un enfoque integral, que subraye:
- La continuidad de la escalada militar — las incursiones no son aisladas, sino parte de un patrón sostenido con drones y cazas furtivos.
- El impacto sobre la población civil — vuelos cancelados, rutas aéreas cambiadas, venezolanos varados en el exterior, incertidumbre.
- La dimensión diplomática e internacional — declaraciones de Estados Unidos, condenas regionales, rumores de posibles operaciones más agresivas.
- La vulnerabilidad institucional en Venezuela — la capacidad de defensa real, la respuesta del régimen, y los riesgos de un choque accidental.
La jornada de hoy marca otro punto de inflexión en la crisis entre Estados Unidos y Venezuela. Las armas ya no son sólo verbales: el cielo venezolano se ha convertido en un tablero estratégico.
